Robert
Guédiguian regresa a una Marsella soleada, a las preocupaciones y luchas
obreras, a los lazos de generosidad, y lo hace nuevamente a través de sus
fieles actores porque en su esencia y forma de actuar este director encuentra
la humanidad de sus personajes y el latir de su cine.
Desde una vida
cincelada por la convicción en unos valores sociales y en su pertenencia a la
clase proletaria, los personajes de Las nieves del Kilimanjaro respiran tranquilos, hasta que un suceso brutal y
traumático les golpea y todo parece fragmentarse y caer por los suelos.
Frágiles y
desnudos ante sus emociones, miedos y dilemas éticos van paso a paso
recomponiéndose gracias a la bondad de sus actos.
Uno sale de la sala
de cine preguntándose en qué mundo vivimos y con una sensación gris ante el incierto futuro de las generaciones más jóvenes, pero también confiando
en la fortaleza del individuo para superarse dándose al otro .
Lee el poema de Victor Hugo Les Pauvres gens. Este poema ha sido la fuente de inspiración de la película. poema Les pauvres gens
Más información sobre Les neiges du Kilimanjaro
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